Estimados amigos y colegas:
Os recordamos
que, el próximo jueves 25 de abril, a
las 20hs., en la calle Riera de San Miguel 1, bis, dentro del espacio Diálogos
en las Fronteras Jacques Nassif nos hablará sobre:
No hay proporción sexual : una solución insospechada.
¿ Pueden los seres humanos curarse del amor ? La evidencia nos muestra
de que no hay amor feliz:
1. Nunca se puede corresponder a un amor que es a cada caso de
transferencia, ya que esta transferencia, lo sabemos, va siempre en sentido
único.
2. Si los sentimientos son recíprocos, eso siempre hará diferencia: lo
que torna el diálogo en un imposible es
que el reino de la memoria es de cada
uno, y eso no se puede compartir.
3. El lenguaje mismo, en tanto lugar donde se alberga el inconsciente,
impide que se produzca entre las consciencias una comunicación transparente.
4. No queda entonces otro remedio que
el de avasallar al otro en cada demanda . Esta no puede ser consentida,
ya que nunca logra expresar un deseo que no se convierta por el que lo articula
en alguna toma de poder.
Son todos estos temas que se ven resumidos en la fórmula lacaniana que
debe ser traducida por proporción en vez de relación, ya que este “rapport”
sexual que no existe es además la comprobación de que no hay congruencia entre
los goces. Los amores, cuando resultan complementarios, aparentando no ser
afectados por lo que queda como suplemento en esta proporción, encaminan los
sujetos concernidos en la dirección de un incesto repentino y rechazado que
cuaja la relación, con el hormigón del odio.
Vale mejor entonces que esta proporción quede sin resolverse, y que
eso se traduzca por la permanencia de un resto, de un suplemento.
Es al planteo de lo que constituye este suplemento que esta charla
estará dedicada, ya que tomarlo en cuenta puede efectivamente aportar una
solución insospechada.
Nunca falta en las vidas de los sujetos humanos la existencia de un
objeto que cada niño se crea para salirse del atolladero de su primer amor
siempre decepcionado : quiero hablar de la muñeca.
No lo resuelve todo de la proporción fallida, por cierto, pero es un
objeto que nunca produce malentendidos, en la medida en que ayuda a hacer
existir, por lo menos, una proporción
textual, haciendo un logro del fallo.
Esta muñeca es lo que restablece entre voz y letra una proporción sin
resto; es lo que asesta entonces que queda siempre al sujeto la posibilidad de
crearse un metalenguaje propio, en el cual una palabra pueda escaparse de todos
los equívocos del inconsciente, estructurado como un lenguaje, para impedirlo.
Se entiende así que todas las muñecas de hoy pueden hablar y escribir.
Se han convertido en artefactos donde se desencadena el poder de la última
tecnología que aniquila toda distancia material entre los cuerpos y encierra
cada vez más el sujeto en su sí mismo.
Pero, en este reino cada vez más extendido de las muñecas, es a partir
de la clave que me proporcionarán los cuentos de los románticos alemanes del
siglo pasado (según mi opinión los verdaderos ancestros del psicoanálisis) que
lograré identificar tres categorías : la más hermosa es evidentemente la imagen
especular, cuando logra hacerse pasar por un substituto
del sujeto mismo : el golem ;
la secunda, el fantasma, es la
más entrañable, ya que puede sustituir al sujeto fallecido, haciendo revivir el
objeto amado y perdido; en cuanto a la tercera, es la más fea, pero la más
poderosa : tiene como nombre la mandrágora
y es su misterio el que intentaré desvelar a partir de las relaciones que
entreteje con las dos otras.
Jacques NASSIF
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